Las empresas deben valorar sus marcas para muchos
propósitos. En los casos más simples, las razones para la determinación de un
valor para una marca pueden ser:
1.
Encontrar un comprador para la marca;
2.
Valorar los activos en el balance;
3.
Proporcionar información a los inversores;
4.
Para utilizar la marca como garantía de un
préstamo;
5.
Por razones fiscales.
Los compradores potenciales también suelen valorar las
marcas de otras compañías antes de efectuar una oferta para comprar la empresa
o sus activos. La valoración de la marca es una herramienta que se utiliza en
fusiones y adquisiciones, planificación, negociaciones de joint-ventures, préstamos garantizados, administración concursal, presupuestos,
nuevos productos y desarrollo de análisis de mercados, evaluación de agencias
de publicidad, relaciones con los inversionistas externos y comunicaciones
internas de marketing.